Después de una larga espera, la duquesa de Cambridge, Catalina Middleton, ha dado por fin a luz a un varón que, nada más nacer, ya es el tercero en la línea de sucesión de la corona británica. El palacio de Kensington ha confirmado la noticia a las 20.30 de la noche (hora local británica) aunque el bebé había nacido cuatro horas antes. Middleton ingresó en el St Mary’s Hospital, en Paddington por la mañana con los primeros síntomas de parto acompañada con la máxima discreción de su esposo, el príncipe Guillermo y sin escoltas.
Para la desesperación de los periodistas que esperaban hacía dos semanas enfrente del hospital, la noticia ha llegado por fin en un día lluvioso después del verano más caluroso que se recuerda en Londres desde 2006. Los expertos ya vaticinaron que las mamás primerizas suelen tardan alrededor de 12 horas en tener los primeros síntomas de parto hasta que por fin dan a luz. Y así fue. Ésta será la primera vez en la historia de la corona británica desde tiempos de la reina Victoria en la que coincidan cuatro generaciones: la reina, su hijo, su nieto y su bisnieto.