Google pagará una multa de $22.5 millones por violar una promesa de privacidad al rastrear furtivamente a millones de internautas que utilizan el Safari de Apple.
En octubre pasado Google firmó un acuerdo por 20 años que incluyó un compromiso suyo de no engañar a los consumidores sobre sus prácticas hacia la privacidad.
El seguimiento virtual se realizó mediante miniprogramas llamados cookies, que ayudan a los servicios de internet y a los anunciantes realizar trabajo de mercadotecnia con base en el análisis de los intereses implícitos en la navegación de una persona por internet.
Google retiró inmediatamente su tecnología intrusiva de Safari después de que se reportó la manipulación.
Sin embargo, el hecho de haber eludido la configuración integrada por Apple en su navegador pareció contradecir una declaración publicada por Google en su centro de ayuda en línea, en el cual aseguró a los usuarios de Safari que no necesitaban hacer nada más para asegurar que Google no rastrearía sus actividades en línea. La aparente contradicción entre las palabras y la acciones de Google fueron el foco de la investigación de la FTC.