El cantante puertorriqueño Ricky Martin reaccionó ante las polémicas declaraciones de un pastor bautista, el reverendo Charles Worley, que proponía encerrar “a todas las lesbianas y gays en un campo cercado con vallas eléctricas”.
Desde que hiciera pública su homosexualidad hace dos años, el cantante Ricky Martin se ha posicionado como una de las celebridades más activas en la defensa de los derechos de la comunidad gay.
“El reverendo Charles Worley, un alma vacía que difunde su mensaje del odio en nombre de su Dios. Estupidez”, publicó el artista en su perfil de Twitter.
Desde su tribuna en la iglesia de Maiden, en Carolina del Norte, el prelado lanzó el lunes pasado un encendido discurso en contra de los matrimonios entre personas del mismo sexo y criticó la actitud favorable del presidente Obama ante los homosexuales. Worley no dudó en calificar al mandatario estadounidense como un “asesino de bebés y amante de los homosexuales”, mientras aseguraba que este tipo de “pecados” le daban “ganas de vomitar”.
“¿Creen que voy a votar por un asesino de bebés y a un amante de los homosexuales? Espero que Dios tenga clemencia, porque todo esto me provoca unas ganas terribles de vomitar. Les digo desde aquí que la Biblia y Dios están en contra de estas uniones. Yo tengo una solución para librarnos de los homosexuales, aunque no creo que el Congreso la apruebe: pondría a todas lesbianas y gays en un campo cercado con vallas eléctricas”, dijo durante la homilía.
No es de extrañar que el contenido de este peculiar servicio religioso haya enfurecido a Ricky, quien está muy implicado en el movimiento asociativo del colectivo homosexual.
Fuente: El Nuevo Dia