ZÚRICH (Reuters) – Joseph Blatter sacudió el martes al mundo del fútbol al renunciar inesperadamente a la presidencia de la FIFA, cuatro días después de ser reelecto para un nuevo periodo y en medio de un escándalo de corrupción que ha sumido a la organización en la mayor crisis de su historia.
Blatter, de 79 años, anunció su decisión en una conferencia de prensa en Zúrich, seis días después de que el FBI realizó una redada en un hotel en la ciudad suiza y arrestó a varios funcionarios de la entidad.
“Pese a que tengo un mandato de los miembros de la FIFA, no siento que tenga un mandato de todo el mundo del fútbol: los hinchas, los jugadores, los clubes, la gente que vive, respira y ama el fútbol de la misma manera en que todos amamos la FIFA”, dijo Blatter en una rueda de prensa convocada con poca antelación.
“La FIFA ha sido mi vida (…) Para mí lo importante es la FIFA y el fútbol en todo el mundo”, destacó el dirigente suizo. “Se va a convocar a un congreso extraordinario para elegir a mi sucesor lo más rápido posible”.
La FIFA dijo que Blatter seguirá al mando de la entidad hasta que se vote quien lo reemplazará.
“La FIFA necesita una profunda reestructuración”, agregó el suizo, quien asumió el poder en la FIFA en 1998 y había sido elegido el viernes para un quinto mandato al frente de la entidad.
Autoridades de Estados Unidos acusaron de corrupción la semana pasada a varios destacados dirigentes de la FIFA y a ejecutivos corporativos, en su mayoría latinoamericanos, mientras que Suiza investiga por separado el proceso por el que se eligió a Rusia y Qatar como sedes de los Mundiales de 2018 y 2022, respectivamente.
Ambos países niegan haber cometido ilícitos y el presidente ruso, Vladimir Putin, había acusado la semana pasada a Estados Unidos de liderar los esfuerzos para forzar la salida de Blatter de la FIFA.
Pese a que Blatter no fue mencionado en las investigaciones de Estados Unidos o Suiza, hubo varios a llamados a que renuncie, especialmente desde países occidentales.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos y el FBI no respondieron de inmediato a los pedidos de comentarios sobre la renuncia de Blatter.
Algunos de los principales patrocinadores de la FIFA habían expresado ya su preocupación por el impacto del escándalo.
“Fue una decisión difícil, una decisión valiente, y la decisión correcta”, dijo el presidente de la UEFA, Michel Platini, quien en los últimos tiempos se había convertido en un feroz crítico de Blatter.
El ex arquero de Paraguay José Luis Chilavert celebró la renuncia de Blatter.
“Hoy verlo caer a Blatter es el mayor éxito que le pudo pasar al fútbol. El fútbol se había puesto muy triste con la reelección de Blatter, ahora va a estar nuevamente alegre porque se va a transparentar todo”, dijo Chilavert a una radio local.
La investigación se acercaba cada vez más al suizo. La FIFA tuvo que salir a desmentir el martes que su mano derecha, el secretario general Jerome Valcke, estuvo implicado en un pago de 10 millones de dólares que es el centro del caso en Estados Unidos.
Valcke, secretario general desde 2007 y visto como uno de los hombres más poderosos del mundo del deporte, no tuvo participación en estos pagos, que fueron autorizados por el presidente del Comité de Finanzas de la FIFA, dijo el organismo en un comunicado.
El fiscal general de Suiza dijo el martes que no estaba investigando a Blatter.
La FIFA ha sido salpicada por escándalos de corrupción durante décadas, pero ha logrado que la mayor parte de las investigaciones sean internas y no lleguen a las cortes criminales.
Foto: Reuters / Riben Sprich