A pesar de ser uno de los géneros más populares de la actualidad, la música urbana se ve criticada de manera continua por sus temas de violencia y misoginia, cosa que J Balvin cree que se puede cambiar.
Durante la semana, el cantante originario de Medellín, Colombia, recurrió a su cuenta de Instagram para pedir a sus colegas que hicieran música con el único propósito de hacer feliz a la gente.
Al haber crecido en Medellín, J Balvin sabe de primera mano lo que es la violencia provocada por el narcotráfico y lo malo que son las drogas para la sociedad.
“Últimamente nuestro género musical anda más enfocado en la actitud de maleantes y narcos que en la música… Nací en el año 1985 en Medellín, Colombia, donde tuvo auge el narcotráfico, de lo cual no me siento orgulloso, pero es una realidad que en ese tiempo era la plena calentura en la calles y por mas que lo quisieras evitar y no fueras “calle”, algún amigo, conocido o familiar fueron asesinado de las formas más crueles e inhumanas”, escribió el artista.
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“Como exponente del género quiero expresar que esta actitud fue la que dañó por generaciones mi país y afectó la cultura mundial con el mismo vicio. ¡Mejor hagamos música! Me gustaría llevarlos a un barrio de mi ciudad a ver cuantos de los más “calle” del género no salen corriendo o les da un infarto al ver que sus películas no tienen nada que ver con la cruda realidad, respeto pa lo que son calle y guardan silencio porque su dolor y su realidad es mejor no contarla”.
Balvin está perfectamente consciente de la situación actual en su país, y cree que desde que surgió el trap ha promovido un tipo de cultura que va en contra de la evolución positiva por la que la gente de su país ha luchado tanto.