Jennifer Lopez no siempre fue la “Diva del Bronx”, y durante su juventud tuvo que pasar por muchas cosas para alcanzar sus sueños. Afortunadamente, todo le resultó como quería y hoy puede recordar con una sonrisa todos esos momentos que la han hecho quien es.
“Hubo momentos en que no tenía dinero y tenía que comer pizza todos los días porque costaba sólo un dólar. Pero siempre tuve la sensación de que estaba haciendo lo correcto”, reveló la cantante en una reciente entrevista.
La también actriz aseguró que antes de llegar al éxito tuvo que pasar por muchas cosas e, incluso, desviarse del camino original.
“Me parece que todos tenemos un destino marcado. Podemos perder el rumbo por culpa de algunas decisiones que tomamos, pero al final del día siempre encuentras de nuevo el camino que se supone debes recorrer. Creo que esta era la profesión a la que debía dedicarme”, aseguró quien hoy goza con fama, fortuna y una figura envidiable a sus 46 años.
Gracias a esas experiencias de la vida, Jennifer Lopez sabe abrazar todo lo bueno que le otorga la vida, incluyendo la posibilidad de ser madre de dos hermosos niños, Emme y Max, a quienes tuvo al lado de Marc Anthony.
“Aterrizar en cualquier lugar a las tres o cuatro de la madrugada para subirte después a un barco, y todo ese tipo de locuras puede resultar muy complicado con dos bebés, pero no cambiaría la experiencia por nada del mundo”, agregó.